Las almas pecadoras sin arrepentimiento no alaban a Dios, ellos no quieren la bendición para convertirse sino para que se fortalezca su relación pecaminosa. No van con el sacerdote a qué les ayude a …Más
Las almas pecadoras sin arrepentimiento no alaban a Dios, ellos no quieren la bendición para convertirse sino para que se fortalezca su relación pecaminosa.

No van con el sacerdote a qué les ayude a cambiar de vida, si quisieran cambiar la vida, buscarían los sacramentos y estarían obedientes a los mandatos de Dios.

Números 6, 22-27 "Habló Yahveh a Moisés y le dijo: Habla a Aarón y a sus hijos y diles: «Así habéis de bendecir a los israelitas. LES DIRÉIS:
Yahveh te bendiga y te guarde; ilumine Yahveh su rostro sobre ti y te sea propicio; Yahveh te muestre su rostro y te conceda la paz.» Que invoquen así mi nombre sobre los israelitas y yo los bendeciré.»"

Quien recibe una bendición del sacerdote exhortando a un cambio de vida, los "irregulares" y las parejas homosexuales, lesbianas, etc, les entrará por un oído y les saldrá por el otro.

Salmo 112 (111), 2 " ...bendita la
raza de los hombres rectos.
"

Marcos 11, 9"... ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!."

Salmo 128 (127), 4 "Así será bendito el hombre que teme a Yahveh."

Salmo 118 (117), 26 "¡Bendito el que viene en el nombre de Yahveh! Desde la Casa de
Yahveh os bendecimos."

Eclesiástico 3, 8 En obra y palabra honra a tu padre, para que te alcance su bendición."

Los justos y obedientes son benditos ante Dios, aunque el sacerdote no los bendiga personalmente, individualmente, si ellos están benditos porque si vienen de parte del Señor, ¿que será los que vienen de parte del demonio?, porque así es la lógica de Dios o eres bendito o maldito.

Proverbios 3, 33 "La maldición de Yahveh en la casa del malvado, en cambio
bendice la mansión del justo."

No vean las cosas humanamente, ahí están por algo las sagradas escrituras que les quitan las telarañas de la ignorancia.
Vidal gutierrez gutierrez
Vg2 Llevas toda la razón.
la verdad prevalece
- y Dios igualmente aborrece al impío y su impiedad; ambos, obra y artífice, serán igualmente castigados. ( Sab. 14:9-10) .